Home / Ισπανικά / Instituto Cervantes / Víctor Andresco: ο νέος διευθυντής του Ινστιτούτου Θερβάντες στην Αθήνα

Víctor Andresco: ο νέος διευθυντής του Ινστιτούτου Θερβάντες στην Αθήνα

Δημοσιεύτηκε: 10:10 μμ Σεπτέμβριος 4th, 2012  


Víctor Andresco: ο νέος διευθυντής του Ινστιτούτου Θερβάντες στην Αθήνα –

Ο Víctor Andresco θα είναι πλέον ο νέος διευθυντής του Ινστιτούτου Θερβάντες στην Αθήνα όπως ανακοίνωσε επίσημα το Ινστιτούτο.

Ο Víctor Andresco είναι πτυχιούχος Σλαβικών Σπουδών (Filología Eslava) του Πανεπιστημίου Complutense. Έχει μεταφράσει και εκδώσει έργα των Tουργκένιεφ, Τσέχοφ, Τολστόι, Μάντελσταμ καθώς και άλλων διάσημων συγγραφέων.

Το 2002 δημοσίευσε το πρώτο του μυθιστόρημα Los clavos del cielo και ένα χρόνο αργότερα το El rey del mundo. Το 2008 εξέδωσε το A buenas horas cartas de amor .

Από το 2004 έως το 2008 διετέλεσε διευθυντής στο Ισπανικό Ινστιτούτο στη Μόσχα ενώ μέχρι πριν λίγες μέρες διεύθυνε το Ισπανικό Ινστιτούτο στο Μιλάνο.

Του ευχόμαστε καλή επιτύχια και δημιουργικότητα στα νέα του καθήκοντα !

Διαβάστε την παρακάτω συνέντευξη και μάθετε περισσότερα για τον Víctor Andresco.

(Επιμέλεια κειμένου: Μαρία Διαμαντοπούλου για το www.paspif.gr )

Víctor Andresco: “El poder del español no conoce límites ni fronteras”

Tras cuatro años al frente del Instituto Cervantes de Moscú, Víctor Andresco conduce ahora con mano firme y sabia las riendas de esta institución cultural pública en Milán.
Nació en Madrid en 1966 y se licenció en Filología Eslava por la Universidad Complutense. Ha ejercido de guionista, crítico literario y productor de cine y televisión, y como escritor ha publicado las novelas, “Los clavos del cielo”(2002), “El rey del mundo”(2003) y “A buenas horas cartas de amor”(2008) 

¿Cree que el idioma español es un arma cargada de futuro?
En España no somos conscientes del arma tan poderosa que tenemos entre manos con el español. Si lo supiéramos, lo trataríamos mejor, lo apreciaríamos más y valoraríamos el trabajo de los que lo enseñan y propagan por el mundo. Cuando estás fuera de Madrid o Albacete, es cuando de verdad te percatas de hasta qué punto es importante y cómo lo respetan y valoran fuera. Resulta muy llamativa la buena imagen que tiene España, lo español, lo que se hace en español, lo que se hace en América, en Guinea Ecuatorial o en cualquier sitio donde se utiliza o se ha utilizado este idioma. Es espectacular, y solo lo percibe el que vive fuera. Pero si estás en casa, rodeado de hispanoparlantes, tanto si vives en Valladolid, Tegucigalpa o Venezuela, nunca tendrás suficiente conciencia de su importancia.
Luego, resulta correcto designar el español buque insignia de nuestra presencia en el mundo…
Se puede llamar como se quiera, pero desde luego es nuestra mejor tarjeta de visita fuera de nuestras fronteras.
¿Formamos una unidad? Es decir ¿Navegamos en la misma dirección España y América?
Aunque con muchos matices, sí somos una unidad, eso sí, llena de “distinteces”, si se me permite utilizar la palabra, y también se observa mejor desde fuera. Igual da que sea lejos de la Península que desde países de América o Guinea Ecuatorial, para comprender que nuestro idioma está hecho de cosas muy distintas, que el español no pertenece sólo al ciudadano de España, sino que consta de hablas y de acentos muy distintos. Es una realidad que debemos aceptar los nacidos en España a la hora de entender que no somos más que el 15% de los hispanohablantes, y que no hay un español mejor que los demás (como creen convencidos algunos colombianos o españoles o mexicanos o argentinos). No hay un español mejor o peor. Existe un gran español que está repartido por toda América, por España, o por otros sitios, como Guinea Ecuatorial, y que es un conjunto dibujado en una lengua muy diversa y muy viva.
Aun así, no es malo que exista ese pequeño pique entre hispanohablantes, ¿no le parece?
-No. En absoluto. Se convierte en algo estimulante. A este paso, y haciendo un símil con las brigadas de estimulación socialista que se crearon en los antiguos países del Este, podríamos alumbrar brigadas de estimulación lingüística, lo que nos daría oportunidad de hacer estancias y convivir con otros países de habla hispánica y comprobar que el español tiene muchas realidades, y sopesarlas y compartirlas.
¿Cómo y cuándo se incorporó al Instituto Cervantes?
Llegué por azar, y aunque parezca un mal chiste, a través del ruso, ya que soy licenciado en lenguas eslavas, por la Universidad Complutense. El Instituto deseaba contratar a una persona que, además de saber ruso, fuera permeable y receptiva a los anfitriones. Rusia es un país muy acogedor, pero siempre que domines el idioma y sepas muy bien cómo comunicarte.
Y, ¿de dónde brota su pasión por el ruso y el mundo eslavo?
Mis abuelos paternos eran rusos y cien años después de que ellos eligieran marcharse al exilio, tuve la oportunidad de volver a su país y comprobar cómo era el ruso que yo había aprendido de pequeño en mi casa. Descubrí que era un ruso un poco acartonado, a veces descatalogado, que sólo se hallaba en los libros, muy propio para obras de teatro. Me tuve que poner al día. Sin embargo, ahora, a partir del año 2000, se ha vuelto a recuperar ese ruso como reacción a los setenta años de existencia e imposiciones de la Unión Soviética.

¿Quiénes son sus autores rusos de cabecera?

Tengo especial debilidad por Tolstoi y por Chejov. Me parece que son dos autores clásicos a los que hay que prestar especial atención.
Cuando ha dicho usted que, para dirigir el centro de Moscú, el Instituto Cervantes precisaba de una persona permeable ¿a qué se refería?
Nada más poner los pies en la capital rusa, aprendí que el español es un valor internacional. Nunca imaginé que nuestro idioma y nuestra cultura gozasen de tan alta estima y potencial. Eso fue lo que más me llamó la atención. Mi primer cometido fue estrechar los lazos y mejorar la relación con los hispanistas, porque Rusia es un país con una larga tradición hispanista, es una de las cunas del hispanismo mundial, y por otra parte me tocó desempeñar una labor un tanto diplomática, porque un centro cultural como el nuestro, tenía y tiene un papel relevante en la ciudad. En un país tan burocratizado y complicado, parte de nuestro trabajo consistía en deshacer ese hielo que existe entre el anfitrión y el foráneo, tan transparente que apenas se percibe, y que puedes destrozar si no eres muy delicado, suave, diplomático, y hablas ese idioma que va más allá de la lengua, eso que los rusos entienden por tener un lenguaje común y que es capaz de arreglar cualquier conflicto en ese inmenso país. Uno de mis cometidos fue encontrar ese lenguaje común para que el Cervantes pudiese trabajar con normalidad.
¿Resultó, pues, complicado poner a funcionar el Cervantes de Moscú?
Gestionar el centro más grande de la red fue un auténtico reto. Hay que tener en cuenta que sólo en labores administrativas hay empleadas más de veinte personas, y que los más de treinta profesores de los que dispone apenas dan abasto en un centro con mas de 5.000 matrículas al año, y hay otros tantos que quedan fuera porque no hay más sitio, no hay aulas para atender a tanta gente, y eso sin contar clases en empresas, universidades y colegios. Había tantas peticiones al día, que al final hubo que recurrir a las citas telefónicas, para acabar con problemas que eran casi de orden público por las interminables colas de alumnos que acudían a matricularse para aprender español.
¿Cómo ven los rusos a los españoles?
Tienen una idea romántica de España que data del siglo XIX. El ciudadano ruso no sólo ama a Cervantes, también ama a sus músicos y sus pintores, por que a lo largo de siglos se ha aquilatado una imagen llena de iconos positivos de España.
¿Acusó mucho el cambio de Moscú a Milán?
-Sorprendentemente el cambio me produjo más frío del que me imaginaba. Pensaba, en mi ingenuidad, que venía a la Italia que uno se imagina desde España, o sea Roma, el Mediterráneo, el Sur, pero Milán es la Italia que linda con Suiza y Austria, la de las montañas, es otra Italia que ahora amo profundamente pero que me costó entender. Me costó mucho más entender Italia que Rusia.
¿Qué imagen guardan los italianos de España y los españoles?
Aman la España simpática, donde se vive bien, los milaneses la asocian sobre todo con Barcelona, las playas y el buen tiempo, los chopitos, la cerveza fría (aquí la beben caliente) y, literariamente hablando, leen a Arturo Pérez Reverte, Luis Sepúlveda, Almudena Grandes, son muy latinoamericanistas.
¿Y usted qué autores italianos lee?
Venero a poetas herméticos como Eugenio Montale o Giuseppe Ungaretti.
Háblenos de su faceta de escritor…
-He dejado de lado, por ahora, la novela negra. Mi próxima obra girará en torno a mi experiencia eslava, en mi próximo libro quiero aprovechar mis cuatros años de experiencia personal en Rusia.

P.Z.
Foto de entrada: Daniel Mordzinski
Άλλες συνεντεύξεις – άρθρα παρακάτω:

 

Σχολιάστε το άρθρο

Το email σας δεν θα δημοσιευθεί Required fields are marked *

*

Δημοφιλή άρθρα



Sorry. No data so far.

x

ΑΥΤΟ ΤΟ ΔΙΑΒΑΣΑΤΕ ?

DELE – Ημερομηνίες και εξέταστρα 2016

Στην Ελλάδα, οι εξετάσεις για την απόκτηση των Διπλωμάτων DELE θα διεξάγονται ...